Hace unos pocos días se cumplieron cuarenta años del histórico juicio a las juntas militares y, también, aunque pocos lo recuerdan , a los delincuentes terroristas.

En un año, todos fueron juzgados y condenados.

El peronismo no acompaño la histórica decisión de Raul Alfonsin que consolido la democracia y alejo para siempre el fantasma de los golpes militares.

Después, de acuerdo a su coherencia, el peronismo en el poder, con Menem, indulto a todos.

Lo que vino después, con los Kirchner fue una sobreactuación injusta y payasesca, y, sobre todo, carente de autoridad moral.

Pero los juicios quedaron en la historia.

Los juicios por corrupción después de veinte años de rapiña peronista pueden llegar a ser históricos y hacer de la Argentina, un país decente como lo fue alguna vez.

Pero lo que se recuerda poco de las primeras medidas de Alfonsin fue su llamado al segundo CONGRESO PEDAGOGICO NACIONAL en 1984. El primero había sido en 1882.

El objetivo de ese Congreso fue discutir el estado de la educación en la Argentina para una nueva vida en democracia, en paz, la unidad en la diversidad y el desarrollo sostenible en ciencia y tecnología.

Después de la catástrofe educativa Kirchnerista, reflejada en su máximo nivel en la Provincia de Buenos Aires, seria muy importante llamar a un nuevo Congreso.

Los acelerados cambios en comunicaciones, ciencia y tecnología hacen indispensable una actualizacion de objetivos y métodos.

Es sabido que a este gobierno y, especialmente al presidente Milei no le interesan ni la salud ni la educación publica.

Es por eso que debería ser la oposición republicana, no populista la que llame a una iniciativa de este tipo.

Los tiempos se aceleran y los últimos años Kirchneristas dejaron un país quebrado, una pobreza inmensa, pero además, una gran ignorancia y falta de oportunidades en gran parte de las clases sociales mas vulnerables.

Entendemos que este llamado a una nueva discusión sobre este tema, tiene carácter de urgente y solo corresponde a aquellos lideres y legisladores no Mileistas ni Kirchneristas , porque a ninguno de esas dos fuerzas políticas les interesa una población educada, culta y preparada.

La ley de la selva es para la selva. NO para la sociedad organizada ,democrática y, sobre todo, republicana.

Enrique Romero Loizaga