En el cierre de los Juegos Bonaerenses, el equipo Sub 17 libre femenino de cestoball de Bolívar fue protagonista de una situación que trascendió lo deportivo y se convirtió en un ejemplo de fair play.

De acuerdo con un posteo publicado en Instagram por la cuenta @cestoballmax, Bolívar debía enfrentar a Necochea en el partido por el tercer puesto de la categoría. Sin embargo, el equipo de Necochea sufrió la ausencia de una de sus jugadoras y no alcanzaba el mínimo reglamentario para presentarse, por lo que Bolívar quedó automáticamente en el tercer lugar.

A pesar de ello, ambos equipos decidieron disputar el encuentro de manera amistosa, que finalmente fue ganado por Necochea. Durante la premiación oficial, Bolívar recibió las medallas correspondientes al tercer puesto, pero al salir del complejo donde se disputó el partido, las jugadoras bolivarenses, por iniciativa propia, se las entregaron a las de Necochea como reconocimiento por el esfuerzo, al espíritu deportivo y por sobre todas las cosas como una aceptación del resultado.

El gesto, realizado sin cámaras ni público, fue registrado solo por algunos celulares y luego difundido por @cestoballmax. Lo llamativo es que, sin saber aún de esta acción, la organización de los Juegos ya había seleccionado a Bolívar para recibir el premio Fair Play, enterándose después del hecho que reafirmó la elección.

El gesto fue agradecido por el equipo de Necochea y valorado por la comunidad del cestoball bonaerense. "Tiene mucha más alegría el que da que el que recibe", recordó el posteo citando una frase de Tita Merello, en referencia al espíritu del deporte amateur y los valores que lo sostienen.