Hace algunas semanas durante una muestra de herramientas en Electricidad Lavalle, un momento de tensión interrumpió la jornada cuando una persona comenzó a ahogarse tras ingerir un trozo de carne. Entre los presentes, el bombero bolivarense Maximiliano Gorla advirtió la situación y reaccionó de inmediato. Gracias a su entrenamiento, aplicó la maniobra de Heimlich y logró salvarle la vida.

"Pasa por al lado mío y vi que estaba tambaleando. Me di cuenta que algo le estaba sucediendo. Se había ahogado con comida, exactamente carne", contó Gorla, integrante del cuerpo activo de Bomberos Voluntarios de Bolívar. Su rápida intervención evitó un desenlace trágico.

"Cualquiera puede ayudar. La primera vez que hice esa maniobra, no es difícil, es práctica". Recordemos que hace más de cuatro años protagonizó una situación similar en 9 de Julio, ya que tuvo que hacerle RCP a una persona para salvarle la vida.

Gorla relató que el momento fue de gran intensidad: "Sentí alivio. Fue mucha la adrenalina en ese momento. Eso demuestra lo fundamental que es estar preparado y seguir capacitándose. Cualquiera puede hacer un curso de RCP, porque a cualquiera le puede pasar", afirmó.

A raiz de esto, Bomberos Voluntarios reconoció a Gorla por su labor, entregándole una plaqueta

Su compromiso y vocación vuelven a poner en valor la importancia del conocimiento en primeros auxilios y la preparación constante de los bomberos voluntarios.

La mañana